martes, 19 de abril de 2016

Será como antes?

Hola ex diario.
Cuando te escribía era un querubín, pero qué inteligente era.
Y hoy, mínimamente 4 años después de tocarte por última vez, digo ERA, era porque hoy me siento... incapaz.
Quién habrá leido este blog alguna vez? Creo que nadie.
No importa, espero que siga teniendo esa preciada popularidad.

Hoy debo contarte, que mi vida es distinta, que extraño tantas cosas, pero que también disfruto muchas nuevas, no voy a mentir.
Y también, espero, quizá, satisfacer una continuidad en la prosa característica que poseía.

Esto sin dudas, es un valle de letras, un pueblo abandonado, escondido tras la montaña, bajo la nieve, que es un laberinto de casas, donde cada una representa un hito, una escultura al vendaval de circunstancias que inundan el mar, el oceano infinito que es el vivir, ese mar eterno puede, quizá, dormirse en un segundo, en un día, en una existencia.
Oh cuántas veces habré naufragado en puertos invisibles, cuantos cielos oscurecieron mis pasillos con implacables gotas de verdad.
Cuánto habré navegado por los ríos de estepas desérticas, a contra corriente buscando tu río, el único gran amazonas que dio tanta luz a un alma que hoy siente que se apaga. Oh qué será de esas aguas dulces y cálidas donde me mecías cual criatura a merced de las tormentas.
Y aún en la noche, pareciera que tus brazos recorren mis campos y mis estrellas.
Cuando el mundo se transforma en una vidriera, y camino por él con una lista de compras, cómo quisiera, dejar la vida por un trozo de naturalidad, cómo necesito esa esencia, auténtica.
Hoy todo es tan superficial, tan plástico, tan aburrido.
Dónde, en qué lugar, habrán muerto, o se habrán escondido esas emociones que erizaban los pálpitos más dulces del corazón.
Cuándo fue, que se durmió la vida.
Mi transgresión, ha sido desear, y hasta he conocido el hastío de ganar, pero de ganar más plástico, más banalidad. Rostros imberbes, palabras descartadas, desechadas, dichas con el desdén propio de la indiferencia.

Qué me han robado, qué he perdido, qué se ha desvanecido...




No hay comentarios:

Publicar un comentario